lunes, 18 de febrero de 2019

Mi opinión nº206 "El amor que llegó de Hollywood" de Alessandra Torre.

Autora: Alessandra Torre
Editorial: Pàmies
Sello: Phoebe
ISBN: 978-84-17683-05-4
Género: Romántico/Erótico/Contemporáneo
Número de páginas: 350
Cole Masten lleva años siendo el marido perfecto de Hollywood, pero, allí, los amores eternos solo duran en la pantalla, así que cuando su mujer le abandona se convierte en el soltero dorado de la meca del cine. Que tengan cuidado las chicas de Los Ángeles, hay un chico malo suelto en la ciudad, y está dispuesto a arrasar con todo. Summer Jenkins. Esa soy yo, una chica sureña atrapada en Quincy, Georgia. Me encanta cocinar pollo y albóndigas, soy capaz de ganarle todos sus ahorros al póquer a un hombre hecho y derecho y me votaron “Mejor amiga” en el último curso de secundaria. Nuestros mundos eran muy diferentes, nuestras vidas no deberían haberse cruzado nunca. Pero Cole Masten leyó un libro sobre mi pueblo y, seis meses más tarde, su avión tomaba tierra en la polvorienta pista de aterrizaje de Quincy, trayendo con él a Hollywood para hacer una película. Supe desde el principio que solo representaría problemas… para nuestro pueblo… y para mí. A veces los polos opuestos no deberían estar destinados a atraerse.
¡Buenos días mis delicias!
La opinión que os traigo hoy es sobre una novela que ha salido publicada hoy día 18 de la mano de Phoebe Romántica y que me ha fascinado completamente y se trata de… “El amor que llegó de Hollywood” de Alessandra Torre, una nueva puesta de la editorial con la que no ha podido acertar más os lo aseguro, tanto que me he quedado con ganas de conocer más sobre la bibliografía de esta autora. Quiero aprovechar y agradecer a la editorial el envío del ejemplar para su lectura. Y sin más demora...¡Vamos allá!. 


La sinopsis cuenta lo suficiente para ir abriendo boca así que voy a dar comienzo con mi opinión como siempre hago. Os daré a conocer a los protagonistas, personajes secundarios, pluma de la autora y lo que creo que podréis encontrar en esta novela.

Nuestros protagonistas son Summer y Cole. 
Summer: una chica sureña de 29 años que vive en una pequeña casita en Quincy, en el condado de Georgia, junto a su madre. Lleva viviendo en el pueblo desde que tenía cinco años y siempre fue apreciada y respetada por los miembros de la comunidad, hasta que hace tres años cometió un error que la puso en el disparadero y provocó que la gente le diese de lado, a pesar de seguir tratando con ella de manera recelosa y con fingida educación. Es una persona trabajadora, honesta, educada, divertida, hospitalaria, responsable y modesta. Pero también tiene un carácter de mil demonios cuando la provocan, es muy testaruda y no se deja amilanar por nada ni por nadie. Cuando una avalancha de tráilers y caravanas irrumpen en el tranquilo pueblo, debido a que se va a rodar una película allí por la historia que hizo famoso a dicho pueblo a finales del siglo XIX, no puede evitar fisgonear y enterarse de quiénes son los protagonistas. Ella siempre ha admirado a Cole Masten por su trayectoria profesional pero cuando lo conoce en persona y trata de primeras con él… automáticamente le cae mal. Aunque tampoco puede evitar sentirse atraída por él, algo que no comprende ya que no le soporta. Pero ella es una sencilla chica sureña de campo y él se acabará yendo cuando terminen de rodar la película y ella volverá a su apacible vida, a ser posible en otro lugar. 


“En Quincy se siguen observando a rajatabla las sencillas tradiciones del Sur que llevan siglos existiendo: sonreír, tratar al prójimo como a ti mismo, ser amable, no contar los secretos, cuidar a los amigos y mantener a los enemigos todavía más cerca.
Y, desde el principio, Cole Masten fue mi enemigo”.

Cole: es un famoso actor de Hollywood que tiene todo lo que puede desear y sin necesidad de mover un solo dedo, ya que tiene gente a su servicio que lo hace todo por él. Como se dice vulgarmente “no tiene abuela”, ya que está completamente endiosado, es creído, egocéntrico, irritante y un largo etcétera de calificativos que lo describen… lo que viene siendo una auténtica joyita. Cuando descubre que su mujer le engaña con otro, con el corazón hecho pedazos deja en manos de su abogado los trámites del divorcio y pone tierra de por medio trasladándose a Quincy, el pueblo alejado de la mano de Dios donde va a rodar su próxima película. Cuando llegue su estupor será épico ya que él está acostumbrado a otro estilo de vida, y si le añadimos que una sureña rubia con muy malas pulgas y una más que dudosa cortesía y amabilidad le ha dejado claro desde el principio que no le cae nada bien… presidente que su estancia en el pueblo va a ser un auténtico infierno. Pero hay algo en ella que le atrae como la luz a las polillas e intentará por todos los medios mantener las distancias por su bienestar físico y mental. En cuanto se ruede la película su intención es poner pies en polvorosa para regresar a su anterior vida, donde todo el mundo hace lo que él quiere y nadie le desafía ni le provoca como la dichosa chica de campo. 


"¡Guau!. ¿En serio había caído tan bajo que el hecho de que una joven que no conocía mirara a otro hombre le preocupaba?
Era natural que la chica lo mirara, que su atención se desviara de él, en especial cuando había sido (...) quien le había preguntado. Pero aún así... Tenía tres Oscars en su haber, podría haberle dirigido al menos una miradita”.

Sobre los protagonistas debo decir que son brutales, creados para ser arrolladores, carismáticos, apasionados y con un temperamento que los hace únicos. Son personajes de peso que nos muestran su carácter y vulnerabilidad sin ningún tipo de filtro, auténticos de principio a fin con sus muchos defectos y sus muchas virtudes. Me ha gustado que la autora durante el desarrollo de la historia haya plasmado pinceladas de la niñez y adolescencia de los protagonistas para así poder darle sentido a la actitud de ambos y a ciertas situaciones que se dan lugar ya sean juntos o por separado. 


“—No haga eso.
—¿El qué? —Cole se impulsó desde la barandilla del porche.
—No sonría así. Es espeluznante.
Él se puso serio.
—diez millones de americanas no estarían de acuerdo contigo.
—Entonces, hay diez millones de americanos que son idiotas.
Cole no dijo nada, pero decidió, en ese mismo momento, que esa chica no le importaba demasiado”.

Respecto a los personajes secundarios la verdad es que hay una gran elenco, pero os voy a dar a conocer a los que más han llamado mi atención por lo relevantes que son durante el desarrollo de la historia. 
Ellos son… 
Ben: es al primero que mandan de Hollywood para tantear el terreno. Es el buscador de localizaciones, es bastante melodramático y con un punto de histeria que lo hace muy gracioso. Hará muy buenas migas con Summer. 

Justin: el chico para todo de Cole, lo que viene siendo su secretario. Se conocen desde hace más de una década y siempre está dispuesto a acatar sus órdenes. En el fondo se nota que siente mucho cariño por su jefe.

Nadia: la mujer infiel de Cole. Es una actriz con ínfulas de diva, arrogante, soberbia y una auténtica interesada. Don: director de la película. No gana para disgustos durante el rodaje y tiene más paciencia que un santo. Haciendo de mediador no tiene rival. 

Francis: la madre de Summer. Es una mujer luchadora y trabajadora que sacó sola a su hija hacia a delante. Tiene los modales de la típica dama sureña. 

DeLuca: abogado matrimonialista que lleva el divorcio de Cole. Es un gran consejero y a su vez el más despiadado depredador en su campo. La verdad es que éste personaje da muy buenos momentos. 

Y por último está “Gallito”, mi preferido. Es quien consigue sacar el lado más humano, protector y desquiciado de Cole, pero eso me gustaría que lo descubráis leyendo la novela. Os aseguro que nos da grandes momentos, muy divertidos donde Cole se siente como pez fuera del agua y es la mar de entretenido verlo obsesionado y totalmente perdido con él, os aseguro que no tiene desperdicio. 

La pluma de la autora… ¡qué digo!, hasta la propia autora me han sorprendido muy gratamente, ¡si hasta han hecho una película sobre esta novela!. Pero a lo que vamos, que me disperso… la pluma de la autora es ágil, fluida, carismática y peculiar, lo que me hace pensar que es su sello de identidad. Durante toda la narración te mantiene expectante con lo que va a suceder a continuación o te vas a enterar, por fin, de la situación que vivió Summer en el pasado. Porque la autora es maquiavélica y te lo va contando a pequeñas dosis poniéndote los nervios de punta ya que lo hace cada equis capítulos, creando intriga evidentemente, pero a mí ya no me quedaban uñas que morderme por lo enganchada que me ha tenido a lo largo de toda su lectura. 


Los diálogos son abundantes y dinámicos como la narración, en la cual hay saltos temporales muy interesantes y esclarecedores. Y hablando de la narración… es una auténtica amalgama de situaciones ya que por un lado está el divorcio de Cole con su mujer, su relación con Summer, el rodaje de la película, la vida de Summer, la prensa y la opinión que el pueblo tiene de ella. Son tantos frentes abiertos y tantos los giros argumentales que no tienes ni un segundo para aburrirte porque no te da la opción, su intención es despertar tu interés y mantenerte enganchada y, os aseguro, que lo consigue con creces. 

Es encomiable la manera que ha tenido de plasmar y describir cada rincón de Quincy, como si te encontrases entre las plantaciones de algodón, o sentada en una mecedora en el porche, la humedad y el calor sofocante dándote en la cara, como si vivieses en carne propia los cotilleos de los habitantes del pueblo recayendo sobre ti al igual que lo hacen sobre Summer, los cuales salen reflejados en negrita en algunos capítulos al final de los mismos, al igual que la presión mediática a través de artículos que se convierten en capítulos literalmente. Nos transporta al sur profundo, a las reglas establecidas en el pueblo, a sus secretos… y cómo no, la manera que tiene de describir absolutamente toda la movilización que se genera a la hora de rodar una película y todos los entresijos y movimientos qué se producen delante y detrás de las cámaras, el enorme despliegue de profesionales de todos los ámbitos… sencillamente es fascinante. 

Las escenas de pasión no son abundantes pero son como una lucha de titanes descritas de forma detallada pero sin resultar soeces. Pero lo que más predomina en dichas escenas es la lucha de voluntades y (valga la redundancia) la lucha interna de ambos, ya que no se soportan pero en cuanto se tocan saltan chispas. 

La historia está narrada por un lado en primera persona por Summer, y por otro lado en tercera persona desde la perspectiva de Cole. Me habría encantado conocer la historia de Cole de primera mano, pero si he de ser honesta me habría perdido grandes momentazos que, siendo narrados en tercera persona, me han hecho ser más consciente de los matices, los detalles y situaciones tan tensas, apasionadas, rocambolescas e intensas que vive durante el desarrollo de la historia. 

El libro consta de 350 páginas, divididas en 112 capítulos de extensión corta y muy corta, contiene también una introducción y su correspondiente epílogo, que a mí particularmente, me ha sabido a gloria. Los capítulos van encabezados con el número que corresponda y algunos de ellos contienen citas de personajes célebres o protagonistas de la propia historia. 

La verdad es que he disfrutado como una enana con esta novela. Me ha despertado un montón de emociones y reacciones, algo que para mí es esencial. No me ha dejado en absoluto indiferente, al contrario, me ha tenido pegada a sus páginas desde la primera hasta la última a causa del tira y afloja y el ni contigo ni sin ti de los protagonistas. Por sus miedos superados, la evolución y madurez que van desarrollando a lo largo de la historia, el descubrimiento de lo que es un verdadero hogar, el hecho de disfrutar de las cosas sencillas y la aceptación de que a pesar de que los polos opuestos se atraen en ocasiones puede que no resulte así o puedas encontrar a tu alma gemela en el lugar mas recóndito de la tierra o, que sea totalmente incompatible la relación entre un chico de ciudad y una chica de campo por la diferencia tan abismal que existe entre ambos mundos. 


“El amor que llegó de Hollywood” es una divertida historia entre dos personas completamente dispares que se pasan la mayor parte del tiempo discutiendo a la vez que no pueden evitar la atracción que sienten. Es la historia del sur profundo donde tantas cosas malas sucedieron hace siglos pero que solo una cosa que sucedió hace muchísimas décadas hizo que se mitigasen los fantasmas del pasado en un pueblo llamado Quincy. Es una novela fresca y adictiva que devorarás en cuestión de horas al no poder soltarla por lo mucho que atrapa. Sin duda alguna recomiendo su lectura al 100%. 

Sus novelas son todas best sellers en las listas de más vendidos de The New York Times, USA Today y The Wall Street Journal. Ha sido firma invitada en publicaciones como las revistas Elle o Cosmopolitan o el diario The Huffington Post. En 2017 se estrenó en Passionflix la película de "El amor que llegó de Hollywood”, primera novela que publicamos de la autora en Phoebe. Desde su casa, en la Costa Esmeralda (Florida), dedica la mayor parte de su tiempo a sus numerosos proyectos literarios y a interactuar con sus seguidores en Facebook, Twitter y Pinterest. Felizmente casada y con un hijo, le encanta pasar su tiempo libre viendo partidos de fútbol americano de la liga universitaria, montando a caballo, leyendo y viendo películas.



    




¡Pues hasta aquí la opinión de hoy!
Espero que os haya gustado y si es así, por favor, comentadla y seguid al Desván...
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1 comentario:

  1. Creo que con este libro puedo disfrutar de lo lindo, apuntado queda.

    Saludos

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